Salud mental en bebés y niños pequeños
Salud mental en bebés y niños pequeños
Los movimientos, comportamientos y relaciones son los cimientos de la salud mental y se desarrollan rápidamente en los primeros años de vida.
Al igual que otros desarrollos, los genes, las expectativas culturales y las experiencias dan forma a los patrones de salud mental a medida que los niños crecen.
Tanto las experiencias positivas como las negativas afectan su salud mental y las experiencias más influyentes son las relaciones que tienen con los adultos
Los padres y cuidadores, siendo seguros, predecibles y respondiendo a las necesidades emocionales del niño están contribuyendo enormemente a su desarrollo emocional y conductual.
Hablar con los niños de sus sentimientos desde una edad temprana los ayuda a aprender a identificar sus propias emociones.
También aprenden al observar a sus padres.
Cuando los ven que mantienen la calma en una situación de stress ellos también organizan sus propios sentimientos de manera que les resulte útil en un futuro vivir, aprender y relacionarse con los demás.
Las reacciones emocionales por sí solas no significan que haya problemas; todo el mundo tiene sentimientos y los exterioriza.
Sin embargo, aproximadamente 1 de cada 6 niños pequeños tiene patrones emocionales, de comportamiento y/o de relación que interfieren con el desarrollo o las actividades cotidianas, y estos problemas pueden afectarlo. incluso en su relación con su familia.
Las investigaciones muestran que estos problemas están relacionados con el funcionamiento del cerebro y pueden aumentar el riesgo de futuros problemas de aprendizaje y de salud mental.
Un niño pequeño puede necesitar ayuda cuando muestra este tipo de reacciones emocionales o conductuales intensas o cuando estas emociones o comportamientos interfieren con las actividades típicas de su edad y cultura.
Un niño pequeño puede tener tanta angustia por la separación que no deja que uno de sus padres se pierda de vista, ni siquiera para ir al baño o dormir.
Otros signos de preocupación pueden incluir rabietas extremas que ocurren muchas veces al día o involucran golpear o romper cosas.
Las reacciones emocionales de los niños pequeños se están desarrollando, por lo que la forma en que las expresan puede ser mixta. Por ejemplo, un niño pequeño ansioso puede llorar, gritar o golpear.
Los médicos de atención primaria pediátrica (PCC, por sus siglas en inglés) son expertos en la salud de los niños pequeños.
Plantear las preocupaciones sobre las emociones, los comportamientos y las relaciones de un niño con los PCC permite obtener el apoyo que necesitan.
Los padres también pueden buscar ayuda si se encuentran con mucho stress ya que no solo los daña sino que con su actuar perjudican el normal desarrollo de sus hijos
El PCC de su hijo puede pedirle que complete cuestionarios (Talleres o encuestas psicosociales)para ayudar a identificar dificultades emocionales o conductuales tempranas o estrés de los padres.
Cuando un PCC es consciente de una inquietud, puede ofrecer apoyo y hacer conexiones con los apoyos y terapias necesarios.
Las terapias efectivas incluyen a los cuidadores y se enfocan en desarrollar fortalezas, practicar nuevas habilidades y organizar las emociones. La buena noticia es que estas terapias funcionan bien, y funcionan mejor cuanto antes se comiencen.
Construir bases sólidas para la salud mental es tan importante como para la salud física.
Los adultos pueden proporcionar los ingredientes clave para unas relaciones seguras y estables.
Fuente
Dra. Julianna Finelli;
Dra. Mary Margaret Gleason;
Dra Lindsay A. Thompson,
JAMA Pediatría. 2023;177(3):324. doi:10.1001/jamapediatrics.2022.5715
Para más información
https://www.healthychildren.org/English/ages-stages/toddler/Pages/Aggressive-Behavior.aspx
https://www.youtube.com/watch?v=3EKPfQYi7GQ
La información y las recomendaciones que aparecen en esta página son apropiadas en la mayoría de los casos, pero no reemplazan el diagnóstico médico.
Para obtener información específica sobre la condición médica de su hijo, se sugiere que consulte al médico de su hijo.
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