El niño de 2 años y 2 meses
El niño de 2 años y 2 meses
Período desde los 2 años y 2 meses hasta los 2 años y 3 meses
Índice temático. Contenido y forma de manejo de la guía en este período
A continuación le ofrecemos el resumen de los contenidos de este mes y cómo proceder en forma cronológica con las indicaciones correspondientes.
A.- Al cumplir los 2 años y 2 meses leer la guía de crianza correspondiente al mes en curso:
- Aspecto general del niño de 2 años y 2 meses.
- Leer las pautas de estimulación.
- Leer el artículo actualizado.
- Leer comportamiento esperado de los padres.
- Leer hábitos diarios y rutina.
- Leer prevención de accidentes.
A.- Al cumplir los 2 años y 2 meses leer la guía de crianza
1.-Aspecto general
A esta edad el niño corre rápidamente pero no lo que está por delante.
No puede aminorar su velocidad.
Comienza a querer compartir parte de sus juegos (por supuesto luego de que él haya jugado).
El niño desea desarrollar sentimientos de competencia y de poder.
Sus estados de ánimo son menos fluctuantes pero, de todas formas, sus emociones no tienen freno: se ríe impetuosamente, llora en forma instantánea y al rato se ríe nuevamente.
Sus actos se realizan sin un pensamiento previo como sí lo hará a partir de los 2 años y 6 meses.
Patea bien una pelota, pero no puede girar ni detenerse rápidamente.
Explora su cuerpo y dibuja los primeros esbozos de personas.
Presenta buena coordinación viso-motora (vista – manos y pies).
En esta etapa la mímica y la entonación expresan el contenido comunicativo.
2.-Pautas de estimulación
Recomendaciones para impulsar y activar su actividad motriz, el lenguaje, su conducta adaptativa, personal y social.
A.- Estimulación para las áreas cerebrales de motricidad gruesa.
- Déjelo subir y bajar escaleras alternando pies.
- Jueguen a pararse en un pie sin ayuda.
- Arrójele pelotas livianas para que las atrape.
- Querrá pararse en puntas de pie para tomar objetos que estén altos.
- Coloque marcas sobre el piso de manera irregular, vaya pisando cada una de ellas y que su hijo lo imite.
B- Estimulación para las áreas cerebrales de motricidad fina.
- Verterá agua de la botella al vaso sin tirar demasiado.
- Podrá desenroscar tapas.
- Alineará los objetos pequeños en forma de tren.
- Comenzará a copiar trazos circulares cada vez más claros
- Guardará objetos pequeños en envases pequeños.
- Ya se podrá desvestir solo.
C- Estimulación para las áreas cerebrales del lenguaje.
- Reconocerá familiares en fotos o figuras de una revista o libro.
- Podrá recordar dónde dejó los juguetes que usó el día anterior.
- Construirá frases de tres palabras.
- Nombrará algunas acciones: “vení- tomá- mirá…..”
- Comenzará a usar pronombres “MÍ- MÍO- YO”.
- Necesitará ayuda para expresar sus ideas.
D- Estimulación para las áreas cerebrales de la sociabilidad.
- Intentará independizarse en sus actos.
- Imitará con sus muñecos las tareas diarias.
- Defenderá sus pertenencias.
- Se frustrará fácilmente y hará berrinches.
3.-Artículo Actualizado
El niño se rehúsa a comer (IV) Causas.
Infelicidad e inseguridad
Es natural que un niño no quiera ingerir su comida si está atravesando alguna situación difícil, porque quizás siente ausentes a sus padres o porque se siente inseguro por algún motivo.
Los trastornos psicológicos provocan la pérdida de apetito y el peso estacionario.
Falta de aire puro y ejercicio al aire libre
Estos también pueden ser factores de importancia en la aparición de la anorexia.
Asociación y sugestión
Cualquier experiencia dolorosa que el niño haya tenido alguna vez: comida sin sabor, caliente, etc. puede ocasionar su rechazo por un período de tiempo.
Es posible que el niño no quiera comer, o, incluso, ni siquiera ver la comida o el plato o taza con el que tuvo su “mala experiencia”.
Actitud de los padres
Las diversas actitudes de los padres como la demostración de amor exagerada y el miedo a que se “desnutra” son partes del problema.
Esto se origina en las normas estructurales que los adultos copian de revistas, libros o programas de TV.
Estos esquemas de aumentar determinada cantidad de gramos por mes, o la necesidad de que coma esta o aquella comida o tantas de esta por semana o los métodos de alimentación rígida en un horario establecido o el comer verduras y no carne, etc. crea, en la familia en general y en los padres en particular, un estado de ansiedad y una preocupación muy difícil de sostener si el niño no se encuadra adecuadamente.
Algunos padres no saben que cada niño aumenta de peso en forma muy diferente y que cada uno tiene sus gustos y preferencias, tanto en el sabor como en los utensilios a utilizar.
Otra actitud errónea es la insistencia exagerada para que el niño conserve buenas posturas y comportamientos en la mesa. El niño es reprendido constantemente por su conducta y termina fastidiándose y sin ganas de comer.
La ansiedad, la sobreprotección y la impaciencia son otras causas del problema de apetito.
Prevención
La mayoría de los problemas de alimentación comienzan entre los diez y los dieciocho meses de edad. Esta es la época en la que el niño está desarrollando su independencia de carácter, su autonomía y su resistencia a ser dominado.
Se debe recordar siempre que los niños nacen con un apetito propio y éste es suficiente para responder a sus necesidades.
Los gustos y los desagrados deben ser respetados y nunca se debe obligarlos a comer.
4.-Comportamiento esperado de los padres ante un niño de 2 años y 2 meses
Las necesidades de la familia son completadas.
El lenguaje le permite al niño una mejor relación familiar y con el entorno.
Posee un vocabulario de unas 30 a 35 palabras.
Además, hace lo posible para llamar la atención de los demás en cada una de sus actividades.
Los padres identifican bien los problemas y los afrontan de la mejor manera.
Comprenden cómo las costumbres ambientales inciden en el desarrollo de su hijo y no las censuran, sino que adoptan lo mejor de esa costumbre para cada caso.
Son amables y enseñan a los hijos esta actitud en todo momento.
Reconocen y compren el comportamiento de los hermanos del niño. Estos pueden ser dominantes o sumisos.
Prohíben las burlas entre ellos.
Si la madre o el padre están solos en la crianza del niño, se los observa capaces de valorar la rutina educativa con la persona que los cuida.
5.-Hábitos diarios y rutina
Alimentación
La alimentación del niño deberá ser equilibrada, balanceada y rica en hierro.
Se aconseja ingerir: carnes, verduras, frutas, pescado, cereales y legumbres.
Trate de mantener un horario regular para las comidas. Los niños siempre tratan de imitar el medio que lo rodea y adoptarán los comportamientos y los hábitos alimentarios que observan.
Respetar desayuno, almuerzo, merienda y cena con una o dos colaciones diarias de frutas. Evitar el picoteo.
La ingesta diaria de leche no debe ser inferior a 600 ml.
A esta edad el niño aún necesita ayuda para comer.
Además rechaza algunos alimentos y conversa mientras come.
No discuta entre adultos ni con los niños en el horario de las comidas.
Es recomendable que coma sentado para que no se atragante.
Sueño
Duerme toda la noche.
Pide algún juguete (un oso, un auto) para llevarlo con él a la cama.
Hábitos evacuatorios
Micciones menos frecuentes, pues aumenta la capacidad vesical.
Se debe llevarlo al baño en horas especiales.
Educación del control de esfínteres: observar meticulosamente la reacción del niño a esta educación (por ejemplo si tiene interés en aprender y UD. ve que quiere comunicarse ante la inminencia de una deposición o micción). Si, en cambio, lo usa como forma de llamar la atención, hay que buscar insatisfacciones en otras áreas.
El éxito de esta educación proporciona un sentimiento de poder valerse por sí mismo.
Vestirse
Ayuda a subirse y bajarse los pantalones.
6.-Prevención de accidentes
La cocina y el comedor
- Mantener las sustancias peligrosas o venenosas cerradas bajo llave o fuera del alcance de los niños. Utilizar cerrojos de seguridad en aparadores y cajones para prevenir que el niño abra algún cajón o alacena que contenga elementos potencialmente peligrosos.
- Asegúrese de que el recipiente de la basura sea inaccesible.
- Hay que tener mucho cuidado con dejar que el niño gatee o camine en la cocina mientras se está cocinando o sirviendo comidas. Aún cuando se encuentre sentado al revés en un porta-bebés puede ser salpicado por grasa o comida.
- Dar vuelta a todas las asas de sartenes y cacerolas hacia adentro, de modo tal que el niño no pueda llegar a ellas.
- No dejar nunca abierta la puerta del horno y mantener al niño alejado de la misma cuando esté caliente.
- No permitir que el niño juegue con las perillas de la cocina. Si es necesario, sacar las perrillas.
- No tomar líquidos calientes mientras se tiene al bebé en brazos: puede derramarse accidentalmente.
- Mantener todos los objetos y líquidos calientes fuera del alcance del niño y, especialmente, alejados de los ángulos de mesas y aparadores.
- Mientras el niño esté presente, hay que evitar usar manteles. A los niños les encanta tirar de las puntas.
- Utilizar sillitas de comer estables para que el niño esté bien sentado.
- No ofrecer alimentos fáciles de aspirar como maníes, caramelos, confites, etc.
Así concluimos la guía de crianza para el niño de dos años y dos meses.
IMPORTANTE: Si a los 2 años no completó los talleres de evaluación (el taller físico y el psicomotriz ,) por favor hágalo ahora y que lo conozca cuanto antes su médico de cabecera.
Los mismos están a continuación.
Taller de Evaluación Física 2 Años
Recuerde en este último:
La "V" significa "verdadero"
La "F" significa "Falso".
Para imprimir los talleres siga estos pasos: clic-enlace
